Seguir
adelante
Encontrar aquello que buscabas,
y perderlo en un instante.
Creer en un amor para toda la vida,
y que dure tan sólo un suspiro.
Sentir que tocas el cielo con las manos,
y darte cuenta que es una sensación vacía.
Confiar en las personas,
y vivir la crudeza de la traición.
Desear con todas tus ansías que alguien no
se vaya,
y oír la puerta que se cierra tras sus
pasos.
Errar tantas veces el camino,
hasta llegar a creer que nunca lo
encontrarás.
Decir las palabras más sentidas,
y arrepentirse con el correr de los días.
Dejar pasar algunas oportunidades,
y lamentarte luego.
Perder a la gente más importante que has
tenido,
y asegurarte de que nunca hallarás a
alguien igual.
Soñar las cosas más hermosas,
y que se diluyan con la mañana.
Cautivarse con una mirada,
y no volver a cruzarla.
Y a pesar de todo eso,
a pesar de las pérdidas,
de la infinidad de desatinos,
del sabor amargo del amor no correspondido,
del silencio de algunas personas,
de esperar algo que tal vez nunca llegue,
de tantos encuentros y desencuentros,
sólo importa seguir adelante.
Seguir adelante,
porque hasta el más crudo dolor pasa,
porque en un momento las lágrimas ya no
brotan,
porque sin mediar razones un buen día las
sonrisas afloran
y el pasado queda tan atrás como si
pudieras mirarlo,
y convencerte de lo capaz que eres de
equivocarte.
Seguir adelante,
aunque arrastres unas cuántas cicatrices,
y duelan de vez en cuando.
Aunque cargues un “Te amo” nunca dicho,
una última mirada,
un abrazo a la deriva,
una palabra enmudecida,
o un corazón náufrago.
Seguir adelante,
buscando nuevos desafíos,
persiguiendo algunos sueños,
recorriendo otros caminos,
construyendo diferentes destinos,
esperando otros amores,
Sin otras ganas más que vivir.
P.D: A Marco M. a quien querré siempre.