EL CLUB DE LOS SOÑADORES

miércoles, 30 de noviembre de 2011

AMISTADES SIGLO XXI

Hoy quiero escribirte a vos que estás del otro lado de la pantalla, que no te conozco personalmente, pero que estuviste en mucho momentos complicados que me tocaron vivir en estos últimos tiempos... A vos que alguna vez me preguntaste "cómo estaba", a vos que confiaste en mí, a vos que me hiciste reír, que me dedicaste tiempo, que me preguntaste y muchas otras tantas veces me hablaste sin necesidad de que te dirigiera la palabra...
Quiero escribirte porque, seguramente, vos estuviste ahí detrás del monitor, alguna que otra vez, esperando que te saludara... seguramente en alguna que otra ocasión te pusiste contento cuando el círculito o el cuadradito se puso en verde y, sin embargo, yo ni siquiera te hablé... A vos que alguna vez me preguntaste "Te pasa algo que ya no me hablás?"... o me dijiste "Extraño nuestras conversaciones"... o hasta dejaste deslizar un "Te quiero"...
Nunca nos vimos en persona... no nos conocimos por ser vecinos... no fuimos juntos al colegio o a inglés o a natación o al taller de teatro... No salimos cada fin de semana... No compartimos un buen mate... Ni siquiera, alguna vez, nos dimos un abrazo o estrechamos nuestras manos... Sin embargo, vos siempre estuviste ahí... si te hablaba, respondías, sin si quiera importarte si había pasado una semana o un mes sin que te dirigiera la palabra... Vos siempre respondías y conversábamos como si fuese la última noche que le quedaba al mundo... Y me comprendías... y yo trataba de comprenderte y de serte sincero... Me contaste cosas lindas, cosas tristes, cosas divertidas... y hablamos de sueños, de esperanzas, de algún amor furtivo, de caricias ajenas, de cuerpos candentes... y nos reímos, nos amargamos, nos compadecimos, nos escuchamos, nos aconsejamos, nos hicimos compañía, nos desaburrimos...
Nunca te lo dije antes, pero yo estoy muy feliz de que existas, de que estes... a mi me pone muy contento conversar con vos, aunque a veces no tengo todo el tiempo que quisiera dedicarte, o las ganas que te mereces, o la predisposición para llevar adelante una buena conversación... Pero eso no significa, de ninguna manera, que para mí no seas especial... que no me importes... que no te aprecie... Porque para mí sos más, muchísimo más que un contacto, sos un amigo virtual, un amigo siglo XXI... porque la esencia de la amistad es acompañar y compartir... y vos me acompañaste en infinidad de situaciones y compartiste otras tantas... Por eso no quiero perderte... por eso quiero que sigamos conversando a pesar de los trajines que la vida posmoderna nos pone por delante, que sigamos estando "conectados" a pesar de las distancias...
Aprovecho esta ocasión para regalarte algunas ideas que fui aprendiendo a lo largo de mi vida y que para mí son como un tesoro: 
No te apures, no quieras crecer de golpe o saberlo todo en un instante, disfruta cada vivencia, cada momento que la suerte te pone por delante, y aprende lo más que puedas... Aprendé siempre de cualquier situación y de todas las personas (aún de aquella que creas que no te puede enseñar nada)...
Nunca dejes de tener sueños y ganas de hacerlos realidad, esas raras combinaciones suelen llamarse proyectos. Y los proyectos son los que nos alientan a seguir aunque “perdamos todas las partidas” o “los vientos soplen fuertes”… Son la sal de la vida…
Cada vez que emprendas algo, aunque te parezca lo más insignificante del mundo, ponele el alma, el corazón, todas tus ganas y marcarás una diferencia notable. A veces no conseguimos todo lo que deseamos, lo cual no nos debe impedir seguir teniendo utopías… No te rindas fácilmente, encontrar soluciones exige dar vueltas por el mismo problema un montón de veces, hasta que de golpe, allí frente a nuestras narices, esta la respuesta…
Recordá que nunca es tarde para “barajar y dar de nuevo” y que siempre hay que seguir intentando porque esa es la única forma en que lo imposible se hace posible. 
Pónele mucho esfuerzo y amor a lo que hagas, porque si no amas lo que haces nada tiene sentido y todo se vuelve rutinario e insignificante.
Las palabras del poeta Walt Whitman son más claras y tienen esa magnífica capacidad de sintetizar aquello complejo de explicar: “No dejes que termine el día sin haber crecido un poco, sin haber sido feliz, sin haber aumentado tus sueños…”
GRACIAS INFINITAS!!!!

Con cariño para SANTI A., EXE K. VON..., FRANCO P., ALEX, MAXI G., EZZEQ, CRIS B., BOY M. (Maxi),LEAN G., MARIANO C., JOAQQO D... 

martes, 8 de noviembre de 2011

UN AMOR EN LAS ESTRELLAS

Aunque este rodeado de estrellas,
tú siempre serás mi estrella más brillante y danzarina;
aunque la alfombra roja haga que me olvide de la tierra,
tú siempre serás mi realidad más concreta;
aunque mis sueños no conozcan límites,
tú siempre serás mi cima...
Aunque mis oídos estén cansados del silencio,
tú siempre serás mi murmullo más preciado.
Aunque me canse de la gente,
siempre te querré a mi lado.

Llegaste para iluminar mi cielo,
para encender mi fuego...
Pusiste alas a mis deseos,
me tendiste tu mano
para rescatarme de la multitud
y escapamos de la locura de la vida cotidiana.
Y me diste la fuerza...
el valor para enfrentar las derrotas,
y tus besos fueron un elixir para mis heridas
y tus brazos cobijaron mi desdicha.

Es tan fácil sanar un corazón,
es tan fácil acabar con la desolación,
cuando un ángel toca tu puerta.
Cuando el amor te invita a su fiesta,
es casi como perder la razón...