CHEYRO, LA BRUJA Y LA PÁGINA WEB

No puedo dejar de escribir un post acerca de la locura que se le ocurrió a Cheyro… ¡Dios! Todavía me cuesta admitir que vive en una realidad paralela a la nuestra, que no tiene los pies sobre la tierra y no entiende nada de nada… y supongo que tampoco sabe el significado de la palabra “Discreción”… No hay con que darle es así y tengo toda, absolutamente toda la responsabilidad por haberlo metido en este tema y ahora “mutis por el foro”… me lo tengo que aguantar como si fuera un señorito francés…

Ayer a las 18.30hs oigo desde mi habitación la bocina de un automóvil... Una vez... dos veces... tres veces y cada vez de duración más prolongada... Me asomó a la ventana que da a la calle para ver quién era. Era Cheyro que estaba frente a mi casa. Abro la ventana, lo saludo y él desde el auto me grita que baje que teníamos que ir a un lugar...Tomé un abrigo y salí sin pensarlo dos veces.
En el trayecto cheyro me contó que tiene una tía con "ciertos poderes"... y cuando pronunció esas palabras se me vino a la mente la imagen de una bruja al mejor estilo Harry Potter. Había pasado casi todo el domingo haciendo el bendito informe para presentar el lunes en el trabajo y a Cheyro no se le ocurrió mejor idea que llevarme a conocer a alguien con "Ciertos poderes" de modo que ironicé: " ¿Sí? ¿Qué puede hacer mover platos con la mente... teletransportarse... ver el futuro...?" y Cheyro puso esa cara de no me hagas pensar mucho porque no tengo ganas... Entonces me callé hasta que llegamos a la casa de la tía. Esperaba encontrarme una mujer grande en edad y cuerpo, solterona, rodeada de gatos famélicos, viviendo en una casa en ruinas, con un parche en el ojo y una bola de cristal... Y fue exactamente eso lo que encontré (a excepción de que tenía sus dos ojos y carecía de una bola de cristal)... En cuanto ingresamos a la casa la mujer comenzó a eructar, lo cual fue muy desagradable, pero explicó que era producto de la energía nueva ue ingresaba a sus aposentos...

Nos llevó a una habitación repleta de imágenes de santos, iluminada solamente por unas velas rojas y amarillas, con un olor nauseábundo entre meo de gato y sahumerio barato... Solamente deseaba irme lo más pronto de ese lugar... Entonces la mujer sentenció:- "No estás cómodo"...
-"¡Wow, míren a la gran adivina! - pensé inmediatamente,- ¿Quién puede sentirse cómodo en un lugar así?"

Se sentó en el piso y nos invitó a hacerlo. No quería, sin embargo Cheyro tenía tal emoción por encontrarse delante de la "bruja" que tuve que sentarme a desgano.

Ella cerró los ojos por unos largos, casi eternos segundos, en los cuales aproveché para lanzarle unas miradas furtivas a Cheyro... Y luego de su conversación con los espíritus diagnósticó mirándome fijamente a los ojos: "Sonríes por fuera, sufres por dentro..." y allí quedé estupefacto por el nivel de adivinación de la versión femenina del mago Merlín y sentí ganas de huir despavorido de ese lugar... Sacó unas cartas, me hizo elegir 12, las volteó, observó detenidamente y solamente recuerdo de todo lo que explicó: "... es el fin de lo viejo para darle lugar a lo nuevo... no te resistas a las poderosas fuerzas de la naturaleza que nada puede detenerlas... Tienes a tu favor la ayuda divina de los ángeles... muy pronto verás realizados todos sus sueños aquí en la tierra."... y ya no quise seguir... Me fuí al vehículo, Cheyro estuvo un tiempo más adentro y luego salió.

No me gustó para nada la sesión con la tía que al final no era la tía sino una mentalista que había sacado de los clásificados del diario... Notó muy pronto mi rostro de disgusto, entonces frenó el auto y dijo sonriendo: - Eso no fue lo único que hice...- y un sudor frío recorrió cada cenímetro de mi cuerpo... - ¿Has oído hablar de que un clavo saca a otro clavo?... Estuve pensando mucho y decidí inscribirte en ..... (una página en la cual se buscan parejas, algo así como una consultora de vínculos o sentimental, en donde uno pone el perfil personal, las expectativas, los gustos, etc. y el buscador te tira un listado de posibles candidatos)

En ese mismísimo instante tuve que controlar mi frenético deseo de partirle la cabeza con un martillo… En lugar de efectuar tal acción asesina exclamé: - Vos sos pelotudo ¿no? y él contesto: - Sí, tengo pelotas, ¿Por? - Lo mire y tuve que hacer un esfuerzo enorme para no matarlo con mis propias manos... y prosiguió: - Ya me lo vas a agradecer... Vos confía... que los ángeles están a tu favor...