UN ÁNGEL NEGRO

Nacho me envió un mensaje de texto invitándome a su departamento. Me pedía que pasara lo antes posible, que tenía que hablar de lo sucedido en Cariló. Decidí responder su invitación, puesto que consciente o inconscientemente me moría de ganas por saber qué era lo que estaba tramando.
Cuando llegué acababa de levantarse... Tenía puesta una bata de seda negra y un boxer Emporio... Le aclaré de entrada que no tenía mucho tiempo y me hizo pasar al living de su departamento. Allí me dijo que lo del sábado había sido un impulso, pero que lo había movilizado mucho, que de un tiempo a esta parte venía con dudas... Inmediatamente, solicitó absoluta y total discresión. Me ofreció un trago y se lo rechacé puesto que no acostumbro a tomar alcohol y menos por la tarde jejeje. Luego, se puso frente al enorme ventanal que da al mar y con su mirada perdida en el horizonte preguntó: - ¿Querés que pase algo entre nosotros?
Todo mi cuerpo se estremeció... Tenía en ropa interior, delante de mis ojos, a uno de los chicos más hermosos que he visto en mi vida, un chico de esos que aparecen en los catálogos de moda, con el torso desnudo, el abdomen trabajado, la piel chocolate, el pelo ligeramente revuelto... y se me estaba entregando en bandeja de plata... ¡Si qué era mi día de suerte!jejeje
Sin embargo, a Nacho lo conozco desde hace bastante, y yo mejor que nadie sé que es un ser sin rumbo, como una barca pérdida en mitad de un mar revuelto por una tormenta que no logra hallar la luz del faro... Es un chico que siempre está escapándole a la vida, que no quiere compromisos, que no puede asumir sus culpas, sus dudas, sus temores, que niega el dolor que carga sobre su espalda... ¿A veces me pregunto si será capaz de amar o cómo será su forma de amar?... También, mal que me pese, debo reconocer que es un trepador que todo lo consigue a fuerza de alianzas, traiciones y de regalar su cuerpo al mejor postor...Nacho, mi querido Nacho, capaz de despertar en mí los sentimientos más nobles, pero también los más repudiables... esconde tras su hermosura divina, tras su rostro angelical,un sinfín de intenciones oscuras... Nacho es, simbólicamente hablando, un Ángel Negro...
Se quitó la bata, se acercó como un Adonis al sillón en el que me encontraba y comenzó a acariciarme suavemente por debajo de mi remera, lentamente me fue llevando hasta ese punto en el cual no hay vuelta atrás, donde la sangre hierve y el corazón se acelera... ese punto donde la carne muestra su poderío y la razón pierde su omnipotencia aparente... Sus labios tibios rozaron los míos... Jugó con mi cabello... Exploró con sus manos las zonas vedadas y me envolvió con sus brazos fornidos...
A Nacho no le intereso en lo más mínimo, porque él no es a mí a quien desea, sino que pretende usarme como medio para llegar a Cheyro... para volver a cobijarse bajo su ala... Entonces, me incorporé deprisa, deseándolo con todo mi cuerpo; pero teniendo en claro su juego perverso, juego en el que no podía caer...
Quedó arrodillado en el sofá, mirándome a los ojos y yo observando esa mirada... esos ojos grises, grises de tristeza...
- Salite de esta Nacho... No seas boludo... salite antes de que sea tarde...- y me fui... Apenado por ver cómo una persona, un ser humano es capaz de llegar al extremo de usar su cuerpo para conseguir favores... No lo entiendo... No me entra en la cabeza... pero para Nacho es lo más común del mundo... Tal vez perdí la oportunidad de estar con alguien demasiado hermoso... pero estoy convencido de que indirectamente le hice un favor, que lo ayude... que al rechazarlo le demostré que no todas las personas nos acercamos a otras por interés... Tal vez pueda aprender algo... o tal vez se esté riendo de mí...